El sobrepeso y la obesidad son problemas de salud que cada año siguen en aumento, sobre todo en el área urbana. En el país, el sobrepeso y la obesidad afectan aproximadamente a 2.5 millones de niños menores de 5 años. Y la malnutrición puede suceder de dos formas, por déficit (causa desnutrición y anemia) o por exceso (causa enfermedades no transmisibles, sobrepeso u obesidad) donde se prioriza el consumo elevado de calorías y no el consumo de nutrientes.

Por estos resultados la mayoría de los colegios realizan actividades y menús con el fin de balancear las comidas y prevenir el sobrepeso y obesidad. Pero ¿qué pasa por las noches? ¿es posible mantener ese equilibrio nutricional en casa? ¿es posible realizar una cena saludable para niños?

Ideas para planificar una cena saludable para niños

La alimentación infantil es un tema prioritario. Los padres deben brindar a sus pequeños un menú equilibrado, reducir la ingesta de productos grasos, mantener a raya el consumo de golosinas, bebidas azucaradas, etc. En este sentido, el regreso al colegio les permite a los padres esta ayuda con el ingreso de menús escolares balanceados. Pero nuestros pequeños no se quedan todas las horas del día en el cole así que… el trabajo continúa en casa.

El primer plato de la cena debería estar compuesto casi siempre por verduras, ya sean hervidas, verduras salteadas o ensaladas. También son válidas las sopas y los purés.

En las carnes lo importante es que los niños hayan consumido carnes, pescados y huevos con una frecuencia similar durante toda la semana.

El mejor postre siempre es la fruta y se debe facilitar su consumo, por lo que conviene prepararla para los pequeños. Si bien los menores necesitan muchos lácteos (2 o 3 raciones al día), pueden tomar tanto la leche como el yogur en el desayuno, en la merienda o antes de irse a dormir si han cenado poco.

Pequeños trucos para tener éxito

  • Intentar que los menores no piquen justo antes de cenar.
  • Darles la merienda al menos tres horas antes de la cena.
  • Tener la cena lista siempre a la misma hora.
  • Cenar temprano para que no lleguen muy cansados e irascibles a la mesa.
  • Pedirles colaboración en poner la mesa o en preparar algo sencillo de la cena.
  • Si se sabe que algo no les gusta, ponerles poca cantidad y no forzarles.
  • Comer siempre nosotros de lo que sabemos que a ellos no les gusta.

Ten en cuenta estos consejos al momento de realizar la alimentación de tu pequeño, siempre teniendo el asesoramiento de tu nutricionista para lograr los objetivos planteado. Regálales salud a los que más amas.

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