Incluir o no la carne en el plan nutricional

En estos momentos de cuarentena uno de los alimentos más pedidos son las carnes, sobre todo el pollo. Pero… ¿Es la carne una opción saludable? ¿Las carnes blancas son mejores que las rojas? En términos de salud, ¿Cuál es la porción recomendada de estos alimentos? En los siguientes párrafos explicaremos todas estas dudas.

Las carnes se encuentran hace un buen tiempo en conversaciones sobre nutrición y sostenibilidad. Los científicos advierten que en conjunto con el aumento del consumo de la carne también se ha elevado el desarrollo de la obesidad y de varios tipos de cáncer, además de la fractura medio ambiental para el planeta. Sin embargo, esto no significa que seamos vegetarianos o veganos, ni tampoco buscan que veamos la carne como el demonio. Sino acostumbrarse a controlar su consumo (frecuencia y cantidad). La clave parece estar en adoptar un patrón dietético en el que las proteínas, las vitaminas del grupo B y el hierro procedan mayoritariamente del pollo, los pescados, huevos o las legumbres.

La gran controversia del consumo de carne

En la actualidad el consumo en exceso de carne está relacionado con diversas patologías, aunque diferentes metanalisis presentaron lo contrario pero no fue firmemente corroborado.

Lo que sí está demostrado, según informes recientes de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer o la Organización Mundial de la Salud (OMS), a partir de múltiples estudios de seguimiento a miles de personas, es la relación directa del alto consumo de estos productos con el cáncer colorrectal y de mama, enfermedades cardiovasculares y diabetes.

Las recomendaciones de consumo de las sociedades científicas se concentran en el control del consumo de carne. Por tanto, si controlamos el consumo de carne a solo lo que necesitamos para cubrir nuestras necesidades de proteínas y vitaminas del complejo B (se recomienda que sean de entre 100 y 125 g aunque depende de las características de cada persona).

Así las cosas, escuchamos continuamente que hay que moderar el consumo de carnes rojas y procesadas, y sustituirlas por las blancas, pero ¿sabemos realmente qué es “carne roja”, “carne procesada” y “carne blanca”?

Para responder las siguientes preguntas los invitamos a seguir leyendo nuestro blog nutricional el artículo sobre ¿qué se consume hoy carne roja o blanca?

Y no olvidar que siempre será importante realizar un plan nutricional con la asesoría de una nutricionista para que logres cubrir tus necesidades nutricionales.

Sofía Morales Velásquez

Nutricionista de Libera

CNP 7662