Lo que para las nuevas generaciones en la actualidad representa un tema totalmente abierto a poder dialogarlo, para otro grupo de personas aún es un poco difícil tener que sentarse a conversar sobre sexo. Es por eso por lo que hoy me gustaría dejarles algunas recomendaciones prácticas para mejorar la comunicación sexual con su pareja.

Como muchos saben, cuando hablamos de comunicación hacemos referencia al medio más importante por el cual nos interrelacionamos. Para que la comunicación exista, tiene que involucrarse un emisor, esto es, alguien que quiera decir algo, así como otra persona o grupo de personas que estén dispuestas a escuchar el mensaje.

¿Pero, qué hace que la comunicación sea asertiva?

La comunicación se vuelve asertiva cuando reconocemos lo que queremos expresar y logramos colocarlo en palabras que se ajusten a la realidad de la persona que escuchará el mensaje, respetando sus valores y adaptándonos a sus costumbres.

Partiendo de este punto vamos a la pregunta, ¿Qué tan sencillo es para ustedes hablar sobre sexo con su pareja?

Como hacía referencia al principio, en ocasiones el desarrollo de nuestra sexualidad se ve limitado por creencias, costumbres o cultura. Es que para ser verdad no es un tema que vayamos a tocar en el día a día con nuestros padres o del que conversemos abiertamente con los términos técnicos y precisos.

¿A qué nos lleva el hecho de no conversar abiertamente sobre sexualidad?

Podría generarnos y reforzar prejuicios que se suelen comentar continuamente como:

  • No quiero tener relaciones, porque puedo quedar embarazada.
  • Me puedo contagiar de algo, yo no sé con cuántas personas habrás estado previamente.
  • Los hombres se masturban, pero las mujeres no tanto.
  • No se debe tener relaciones cuando viene la menstruación.
  • El sexo solo es para tener hijos.
  • Yo nunca he sentido un orgasmo, no sé cómo se sienta.
  • Siempre que lo hago debo rendir bien.
  • Ya estoy pasado de años, no puedo tener orgasmos.
  • Si no hay penetración, entonces no es sexo.
  • Vivir una sexualidad espléndida depende de la frecuencia con que lo hagas.

Aunque probablemente estén sorprendidos, algunas de las frases son mitos sobre la sexualidad que aún se mantienen vigentes a raíz del desconocimiento o de las barreras que existen a la hora de hablar sobre sexo, cuidados, entre otros. Lo que se busca es seguir concientizando para que cada vez menos personas tengan pensamientos limitantes dentro del desarrollo de su sexualidad, así como poder practicar un sexo más seguro con nosotros mismos y en pareja.

 

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¿Qué tan importante es la comunicación sexual asertiva para la pareja?

Algunos estudios señalan que en algunas relaciones existe insatisfacción en el ámbito sexual, teniendo como principales argumentos el no poder expresar lo que deseamos o necesitamos para no hacer sentir mal a la otra persona.

Pero siendo sinceros, es difícil decirle a la otra persona qué es lo que no está logrando que lleguemos al orgasmo o que no podamos despejar nuestra mente de preocupaciones para conectarnos plenamente con lo que estamos experimentando.

El problema es que todo aquello que no decimos entre sábanas, podría terminar alejando a la pareja en el contacto íntimo del que tanto esperaban disfrutar.

Es por lo antes descrito, que procederé a desarrollar algunas recomendaciones para intentar comunicarnos mejor en el ámbito sexual y así tener una sexualidad más saludable.

“Primero me conozco yo, luego me disfrutas tú”

En este punto es esencial el hecho de que cada uno desde su intimidad empiece a explorar zonas erógenas que existen en el cuerpo, pero que antes no se había animado a conocer.

La pregunta que los invito a realizar es: ¿Cómo pedirle al otro que satisfaga mis necesidades eróticas, si yo mismo desconozco cuáles son?

Como verán, lo esencial es poder autoexplorarnos a través de la masturbación para así poder darle a nuestra pareja un mapa erótico de lo que nos gusta y cómo nos gusta.

“Hoy invito yo”

Otro punto para tomar en cuenta es tomar la iniciativa, indistintamente del género. Es muy excitante ver que la otra persona te desea y te invita a experimentar sensaciones juntos. Para este apartado podrían utilizar juego de roles, juguetes sexuales, accesorios como lencería, aromas, etc. Solo déjense llevar.

“Estoy algo estresado/cansado hoy, no tengo muchas ganas.”

Como parte de comunicarnos de manera asertiva, también es oportuno que podamos expresarle a la otra persona que en estos momentos no tenemos deseo sexual, pero que en lugar de eso pueden disfrutar de otra actividad juntos.

“Sacudamos el ambiente”

En este punto es estimulante para la pareja, el hecho de no centrarse única y exclusivamente en la habitación como el lugar para tener intimidad. Por el contrario, anímense a explorar otros lugares del ambiente, como la sala, el comedor, el sofá, etc. Invítense a salir de la rutina acudiendo quizá a un hotel con jacuzzi y demás prestaciones.

“Si tu me estimulas, yo te estimulo y juntos nos corremos”

Es importante que, a través de la comunicación y el conocimiento mutuo de sus zonas erógenas, ambos puedan brindarse la estimulación necesaria para llegar al clímax sexual. Recordemos que el sexo y el placer que obtenemos del mismo es responsabilidad mutua.

“¿Y ahora, quién podrá salvarnos?”

Si a pesar de las recomendaciones descritas anteriormente, aún se siguen presentando dificultades a la hora de comunicarse y disfrutar su sexualidad, los invito a que acudan a un profesional especialista en terapia sexual para poder obtener la orientación y recursos necesarios para mejorar su interacción sexual, incluso en tiempos de una pandemia como la que estamos viviendo.

Peter Huamán Yarma

Psicólogo de Libera.

C.Ps.P. 35753

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