Los triglicéridos son el tipo más común de grasa que encontramos en los alimentos como los aceites o mantequilla y que absorbemos a nivel intestinal; y están compuestos por tres ácidos grasos y glicerol. También cuando nosotros consumimos un exceso de carbohidratos como panes, arroz, fideos, harinas al degradarse la glucosa se empezara a almacenar estas calorías como triglicéridos en el tejido adiposo lo que ocasionará el aumento progresivo de peso.
Muchas veces no se presentan síntomas pero puede presentarse dolores de cabeza, mareos, visión borrosa. En cuanto al diagnóstico se debe mantener unos niveles en sangre menor a 150mg/dl, ya que si superamos esta cantidad podemos estar predispuestos a enfermedades cerebro y cardiovasculares como el infarto al miocardio o ateroesclerosis, las cuales son las principales causas de muerte a nivel mundial.
La alimentación adecuada para prevenir o controlar la hipertrigliceridemia incluye las siguientes recomendaciones:
- Cambiar la grasa saturada de frituras por preparaciones al horno, a la plancha, sancochadas
- Cambiar las carnes rojas, vísceras, embutidos por carnes magras como pollo parte de pechuga y pescados de preferencia oscuros como bonito, caballa
- Cambiar lácteos enteros por descremados como queso fresco
- Cambiar pan blanco, arroz blanco por integrales
- Evitar el azúcar refinado y los dulces, galletas, kekes, tortas
- No tomar jugos, gaseosas, extractos ya que los mismos se absorberán más rápidamente
- Incorporar fuentes de fibra de legumbres, menestras
- Consumir dos porciones de vegetales diarios, evitando beterraga, y optar por ejemplo por lechuga, tomate, pepino, espinaca
- Consumir frutos secos como nueces, pecanas, almendras, y no pasas, ni guindones ni higos ni dátiles
- Evitar el exceso de fructosa de plátanos, mangos, uvas, chirimoya, lúcuma; por el contrario, optar por consumir frutas con cáscara como manzanas, peras.
Además, se debe llevar un control del peso manteniendo un IMC o Índice de masa corporal por debajo de 25, y una circunferencia de cintura menor a 88cm en mujeres y a 102cm en varones; lo cual se consigue realizando actividad física regularmente como caminatas durante treinta minutos con una frecuencia de cinco veces a la semana, y llevando una vida saludable evitando fumar y tomar bebidas alcohólicas.
Por último, es importante realizar chequeos regularmente sobre todo si se tienen antecedentes familiares con dislipidemias.
Mencionara además que antes de hacer una modificación en tu dieta debes consultar con un profesional nutricionista quien te guiará en este proceso y te brindará el plan acorde a tu etapa de vida y requerimientos de energía y macronutrientes.
Catherine Schnaiderman
Nutricionista de Libera
CNP 5179
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