¿Qué es la Dispareunia?

La dispareunia o coitalgia es la relación sexual dolorosa, tanto en mujeres como en hombres. Abarca desde la irritación vaginal postcoital hasta un profundo dolor.

Se define como dolor o molestia antes, después o durante la relación sexual.

La dispareunia es más frecuente en mujeres. Sin embargo, también se puede presentar en varones.

¿Cómo es la Dispareunia masculina?

En la mayoría de los casos se refiere a dolor en la eyaculación.

Por lo general, se debe a infecciones en la uretra o en las vesículas seminales, en la glándula prostática o en la vejiga urinaria, o también por fimosis.

De igual manera, puede causarla el contacto con el DIU o con algunos espermicidas. En los hombres son menos habituales las causas psicológicas, tales como la educación inadecuada o la ansiedad por la relación de pareja.

¿Cómo se manifiesta la Dispareunia femenina?

La dispareunia femenina, a menudo aparece asociada a problemas de vaginismo. El dolor en las mujeres puede implicar ardor, quemadura, contracción o dolor cortante, que puede localizarse en la parte interior o exterior de la vagina, en la región pélvica o en el abdomen.

Si bien la mayoría de las mujeres han experimentado dolor en alguna ocasión durante sus actividades sexuales, para considerarse el diagnostico de dispareunia ha de presentarse de forma crónica.

¿Cuáles son las causas de esta condición?

Las causas pueden dividirse en:

• Origen orgánico
• Origen psicológico o emocional

Causas de origen orgánico

Agentes infecciosos, enfermedades genito-urinarias, irritaciones por el material de los anticonceptivos de barrera (preservativos, diafragma, dispositivo intrauterino -DIU-, espermicidas) y, en la tercera edad, vaginitis senil.

Causas de origen psicológico

La pérdida de interés por el compañero, que puede originar una inadecuada lubricación vaginal, o la falta de excitación en el momento de la penetración.

También está asociado a problemas de comunicación o de otra índole en la relación de pareja, educación inadecuada, experiencias sexuales traumáticas (por ejemplo: haber sufrido una violación) o ansiedad.

Se presentará un caso para explicar con más detalle:

“Martha es una joven de 25 años muy atractiva. Menciona haber iniciado su actividad sexual a los 19 años, sin embargo, hasta la fecha no ha experimentado ningún orgasmo debido al dolor que siente al tener relaciones sexuales. Se siente insegura y frustrada, piensa constantemente que su pareja la va a abandonar pronto.

En el transcurso de las sesiones, revela que nunca se ha considerado atractiva, a pesar que muchos hombres intentan seducirla. Tiende a estar muy pendiente de su imagen pública intentando satisfacer las expectativas de los demás, en especial de sus parejas.

Al momento de tener relaciones sexuales (las cuales no desea realizar, sin embargo acepta las demandas de sus parejas) experimenta mucha ansiedad, debido a que cree que su pareja se va a desilusionar al verla desnuda, seré un fiasco en la cama -se dice constantemente- todo esto dificulta el proceso de lubricación, sin embargo, a pesar de todo, continua con el acto sexual para no defraudar a su pareja.

Al profundizar el conocimiento de sí misma, se da cuenta que la necesidad de ser el centro de atención y no defraudar a los demás, sin importar el esfuerzo, viene desde que era niña, ya que era el único medio que conocía para poder recibir afecto de sus padres, quienes eran distantes e indiferentes con ella, por estar centrados en sus problemas conyugales (el padre le era infiel a la madre, con una compañera de trabajo).

Reflexión del caso

Como podrán observar con el caso de Martha, es que muchas veces los problemas sexuales son síntomas (al igual que otros problemas emocionales) de algo que tiene un trasfondo mayor, que debe ser trabajado para que la persona encuentre un equilibrio en su vida, mejorando por añadidura su vida sexual.