Procrastinación en jóvenes universitarios

¿Qué es la procrastinación?

La procrastinación es la tendencia a demorar el inicio de alguna actividad o dejar incompleta una tarea importante para finalizarla mucho tiempo después, todo ello a pesar de que se tenga conocimiento sobre las consecuencias que puede tener no cumplir con la tarea a tiempo.

¿En qué edades se presenta?

Este comportamiento puede presentarse aproximadamente en la adolescencia y se puede mantener hasta la última etapa de nuestras vidas debido a distintos factores; sin embargo, en donde se puede observar un gran número de personas que tienden a procrastinar es en la población universitaria.

Al ingresar a la universidad nos enfrentamos a situaciones completamente nuevas pues en este proceso de exigencias y afronte, tanto los aspectos cognitivos como motivacionales juegan un papel clave en la organización de la conducta académica lo cual implica la realización de actividades que la vida universitaria demanda.

Existen estudios que relacionan la procrastinación con los procesos motivacionales del estudiante, concluyen que los estudiantes con motivación intrínseca y sensación de autoeficacia son menos propensos a dilatar el inicio de sus actividades, mientras que los motivados extrínsecamente (por ejemplo, aquellos a los que los padres le pagan la carrera y se sienten obligados a continuar con sus estudios ,por lo que no perciben la decisión de estudiar como propia) tienen mayor tendencia a dejar sus labores para el final , lo que dificulta , y en ocasiones impide, el cumplimiento de los objetivos , tanto académicos como personales. Esta es una de las razones por la que se enfatiza y recomienda que la decisión de estudiar una carrera universitaria o técnica sea propia y no determinada por comentarios u opiniones externos.

Por otro lado, la procrastinación está relacionada a distintas variables cognitivas, como el miedo al fracaso o una pobre sensación de eficacia en las tareas, además de dificultades en la autorregulación y capacidad de organización. Sumado a ello, a lo largo de la vida académica se ha vuelto una costumbre estudiar con poco tiempo de anticipación al examen, considerando que las evaluaciones tienen una programación previa y no se administran repentinamente, por lo que posponer las tareas o dejarlas para último momento ha sido normalizado; sin embargo, al ingresar a la vida universitaria este comportamiento puede traernos grandes complicaciones.

Algunos consejos

Empieza por la tarea más importante, puedes sentir que te está demandando demasiado tiempo, pero cuando hayas terminado y veas tu gran avance tendrás una gran carga menos.
Es probable que en ciertas ocasiones te sientas muy cansado debido a diversas actividades que realizas en el día por lo que es posible tomar un descanso; sin embargo, es necesario organizarse para que las horas de relajo no sobrepasen o excedan por mucho las horas de tareas y responsabilidades, de manera que formular un horario que nos de ciertos parámetros de tiempo puede ser de mucha ayuda.
Es normal que al realizar una actividad poco agradable percibamos que el tiempo se alarga y parece casi imposible de terminar, para ello podemos dividir la tarea en bloques, es decir por cada intervalo de 30 o 40 minutos de trabajo que realicemos, podemos tomarnos 5 o 10 minutos de descanso. Sin embargo, es importante respetar los tiempos que nos propongamos, para no distraernos demasiado.
Una de las partes más difíciles es empezar, por lo que, si ya comenzaste con un trabajo, continúas constantemente y logras terminarlo, puedes darte un tiempo para disfrutar de una película, pasear a tu mascota o lo que te haga sentir bien, a modo de reforzador. Además, que te ayudará a empezar con energía un próximo proyecto.

Este comportamiento se hace más evidente en la vida universitaria, sin embargo, es probable que esto se presente desde que estamos en la etapa escolar, por lo que es importante darnos un tiempo para reflexionar si presentamos este comportamiento y cuál es el nivel de impacto en nuestro desenvolvimiento, previniendo así que estos malos hábitos puedan llegar a dificultar otras esferas de nuestra vida.